Parellada, Pablo
Este tarraconense (1855-1944) llevó
una vida muy activa.
Junto a sus actividades periodistas y
literarias, ejerció de ingeniero militar, llegando a coronel, y de profesor de
la Academia General Militar.
Utilizaba el seudónimo Melitón
González, con el que firmaba mayoritariamente sus caricaturas y artículos
humorísticos publicados en un gran número de revistas y periódicos, no solo
satíricos: La Avispa, Madrid Cómico, Barcelona Cómica, Blanco y Negro, La
Vanguardia, ABC, Gedeón...
Es uno de los autores más relevantes
de la historia de la época dorada de la parodia teatral. Su vida teatral
comenzó en 1895, en el Teatro Lara de Madrid, con el sainete Los asistentes.
Espíritu observador y gracia crítica
aparecen ya apuntadas en su primera obra e irá puliendo estas cualidades en sus
posteriores obras.
Escribió una novela (Memorias de un
sietemesino) y varias novelas cortas publicadas en El Cuento Semanal.
El ingenio y la inventiva, unidos a
un conocimiento del mundo escénico y de las aficiones del público, limpio de
groserías y ajeno a las estridencias declamatorias, caracterizan sus obras
teatrales y, de ese modo, el autor logra el entretenimiento del espectador.
Presenta situaciones cómicas
inesperadas, desenlaces ingeniosos y sus chistes, equívocos y sátiras son de
raíz inteligente.
Escribe en un lenguaje puro y
elegante, solo deformado para la caricatura, que alcanza su cota más elevada en
el Tenorio modernista (1906), remembrucia enoemática y jocunda en una
película y tres lapsos, en la que satiriza con mordacidad la moda estética
modernista, que con sus barbarismos innecesarios y su retoricismo convirtieron
la lengua española en un lenguaje ininteligible para muchos.
Madrid Cómico (26-03-1892) le dedica un aleluya
donde recoge su espíritu crítico: Dibujante de ingenio, sal y chispa / que
consiguió hacer célebre La Avispa, / donde dio picotazos muy certeros / a
chulos, cantaores y toreros.
Jurado de la Parra recogió otra
aleluya sobre el mismo: Lo mismo sobre el tablero, / que en lo profundo de
un foso, / luce su arte verdadero. / En lo hondo, como ingeniero, / en lo alto,
como ingenioso.
Inimitable humorismo, sátira sana,
ocurrente y graciosa.
De sus obras teatrales destacamos,
además de la citada parodia modernista, los siguientes títulos: Los
asistentes, El regimiento de Lupión, El figón, El filósofo de Cuenca, La güelta
e Quirico, Amor sangre derrama, El Tenorio en Castro Viruta, A reírse toca,
Camelo Tenorio, Los divorciados, En un lugar de la Mancha, La Forastera, Il
cavaliere di Narunkestunkesberg, Los de cuota, Los Macarrones y Tenorio
musical.